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sábado, 5 de noviembre de 2011

Entrevistas - Ajuste por inflación: “Los balances deberían reflejar la realidad”

Cr. Florencio Escribano Martínez
Se trascribe a continuación un interesante artículo extraído de la web del CPCECBA correspondiente a una entrevista realizada al Cr. Florencio Escribano Martínez.

“Estamos en un momento muy particular de la profesión contable en Argentina”. Con esta frase, el Cr. Florencio Escribano Martínez resume un cúmulo de problemas que enfrentan hoy los profesionales y que expuso en las recientes Jornadas de Contabilidad y Auditoría, que se desarrollaron en la sede del Consejo.
“El balance debe reflejar la realidad y estar realizado de acuerdo a las normas contables. Pero estamos inundados de relaciones incorrectas que condicionan nuestra actividad”, agrega.
El primer problema que enumera es la evasión, que existe en todos los países del mundo y que en Argentina es alta.
Como segundo problema remarca “la falta de ajuste por inflación”. “Las normas contables dicen hace ocho años que estamos en estabilidad de precios y eso condiciona, porque la realidad que mostramos en el balance es notoriamente falsa”, advierte y agrega: “Además, estamos en riesgo de entrar bajo las sospechas de la ley de lavado de dinero y de evasión”,
Esto se suma a la multiplicidad de normas que existen y están en estudio en el país NIIF, NIIF para Pyme, las normas vigentes, pronto las normas contables nacionales, y las de los clientes que están regulados por organismos de control con normas propias.
El ex director del CECYT subraya que, pese a que no hay ajuste por inflación ni revaluaciones, los auditores “decimos que la opinión es favorable, porque el balance refleja razonablemente el patrimonio, los resultados y el flujo de fondos de acuerdo a las normas contables vigentes. Eso es cierto, pero es falso que refleje la realidad”.
“Y los contadores nos hemos ocupado de que todos los balances, desde el kiosco hasta la empresa más grande, tengan que tener auditoría. Esto es algo que tendríamos que cambiar”, opina. 

Desafíos
Ante esta situación, plantea algunos temas como desafíos que debe enfrentar hoy la profesión: “¿Debe haber informe del auditor en general, o por excepción? Si no hay revalúo, ¿qué deberíamos hacer? Revaluar. Si no hay ajuste por inflación, ajustar por inflación. Si el balance no está ajustado por inflación, porque la empresa decide no hacerlo, ¿cómo debería ser el informe del auditor?”
Pero incluso en estos casos, hay indicadores” contradictorios”. Y ejemplifica: según el Indec, la inflación argentina desde diciembre de 2005 hasta junio de 2011 era de 60%; según el Índice de Precios al Consumidor de Córdoba, de 90%; el índice promedio de los privados, 165%; y el Índice de Precios Implícitos del PBI, 108%.
Sobre la obligación general de que todas las empresas tengan auditoría considera que habría que tener “distintos productos”. “Si se quiere una auditoría completa, la voy a hacer de modo tal de detectar si hay una operación sospechosa, si hay evasión, etcétera. Pero, además de esto, debería poder ofrecer al cliente una certificación literal o una revisión limitada de estados contables”, considera.
La solución que propone es tener nuevos productos “que nos saquen del atolladero”: “La profesión debe salir del medio: el informe del auditor, hacerlo sólo en los casos de clientes bajo la fiscalización de organismos de control o en aquellas empresas que ‘aguantan’ una auditoría completa. En otro casos, hacer un certificación literal o una revisión limitada de estados contables anuales”.
En este orden, se muestra partidario de reimplantar la certificación literal y generalizarlo para la mayoría de las empresas.
Bregó por qué, además del desarrollo del nuevo juego de normas (“que es correcto que se haga, pero es sólo para la parte de auditoría”) se dé prioridad a estos otros temas. 

Revaluación de activos
Para paliar la falta de ajuste por inflación, el Cr. Escribano Martínez propone aplicar la revaluación de activos.
Hoy, la Federación Argentina de Consejos Profesionales (FACPCE) tiene un proyecto de Resolución Técnica 21 con el modelo de revaluación de activos.
“La iniciativa dice que la RT 17 tiene como único modelo de valuación para bienes de uso y similares, el costo histórico; que las NIIF tienen la revaluación para bienes de uso e intangibles y valor razonable para inversiones; y que esta norma tiene como objeto extenderlo al resto de las normas que no aplican las NIIF”, explica el profesional.
Se plantean tres situación de valuación: Con un mercado activo en el que se conoce el valor del bien en su condición actual; o en el cual se conoce el valor del bien nuevo, y se puede deducir por proporción de desgaste el valor del usado; o cuando no hay un mercado activo.
Aquí dejó planteado una pregunta es ¿hoy el revalúo que no está vigente aún, es una cuestión no prevista? Porque, si así fuera, según el punto 9 de la RT 17, uno podría ir a las NIIF como norma supletoria. “Pero esto no puede hacerse porque la norma contable no lo deja como cuestión no prevista. Directamente dice que los bienes de uso se valúan al costo, no dan opción. Y además, otra norma me dice que no puedo ajustar por inflación. Estoy encorsetado”, subraya. 

Caminos a seguir
Con este escenario, el Cr. Escribano Martínez planteó qué alternativas tiene el profesional auditor: “- Seguir igual, disimular que no pasa nada (lo que hacemos ahora) o saltar el cerco”.
Para esto último, planteó varias opciones.
- “¿Es el ajuste por inflación, una cuestión no prevista, como señala un artículo de Fowler Newton? Yo dudo porque la RT 17 dice que es para las cuestiones de medición no previstas. Y esto no es una cuestión de medición, sino unidad de medida.
- Las normas contables prevalecen, los estados contables son históricos, damos la opinión favorable, de acuerdo a las normas.
- Ponemos una nota de alerta en el balance o en el dictamen previo del balance donde advertimos que desde 2003 hay un porcentaje de inflación acumulada, que podría distorsionar los estados contables, lo cual no se considera porque las normas no lo permiten.
- Calificar el dictamen y decir que los estados contables no reflejan la realidad.
- Ajustar el balance por inflación y calificar el dictamen porque no se ajusta a las normas contables (en Córdoba hay algunos casos). Aquí agregaría un párrafo para señalar que no se ajusta a las normas pero sí refleja la realidad, cosa que no haría si fueran históricos.
- O seguir con estados contables históricos y calificar el dictamen porque no reflejan la realidad, aunque sí coinciden con las normas contables”.
“¿Qué vale más, aplicar las normas de contable, o el código de comercio?”, se pregunta.
“Dejemos las relaciones incorrectas y pasemos a las relaciones correctas. Debemos hacer que los balances reflejen la realidad y, además, ofrecer productos adecuados a la realidad del cliente”, concluye.

Fuente: CPCECBA